Por Luis Muñoz
Eres virgen de Alarilla,
eres virgen marinera,
tu navegas en tu barca
y sin despegar las velas.
Los remeros con orgullo
a ti te hacen navegar
en tu linda Embarcación
y sin parar de remar.
Tú surcas el río Tajo
en sus aguas cristalinas
y te aplauden con agasajos
virgencita de Alarilla.
Vecinos emocionados
no dejan de gritar
¡viva mi virgen bonita!
Qué linda y guapa que estás.
Cuando llegas a la orilla
después de la travesía
te suben en tu carroza
llena de luz y alegría.
Tú eres la realeza
que inspiras al poeta
para hacerte las poesías
así se inspira en tu belleza.